Familias sustitutas: Un compromiso de corazón para proteger a la niñez

El entusiasmo y la dedicación de las familias acogedoras fue palpable desde el primer momento, demostrando su compromiso con el bienestar de los niños, niñas, y su deseo de ofrecer un ambiente amoroso y seguro para que puedan crecer y desarrollarse plenamente.

“Junto a mi esposo y otras familias realizamos el curso de certificación de padres sustitutos, muy esperanzados de poder apoyar de alguna forma, porque tenemos la inquietud de dar ese amor de familia y acoger a estos niños que lo necesitan tanto. Creemos que pueden ser no solamente, alimentados y cuidados, sino también sanados en el corazón y darles toda la alegría posible en el tiempo que puedan estar con nosotros”, expresó Paola, una de las mamás certificadas para brindar acogimiento temporal a niñas, niños y adolescentes que hoy se encuentran en centros de acogida del Estado.

La razón, como explica Gladys Villazón, gerente de Aldeas Infantiles SOS en El Alto, es que el modelo de atención de los centros de acogida en Bolivia es el mismo con que se instauraron los orfanatos en el siglo XIX, modelo que hasta hoy no ha cambiado y que, si bien institucionaliza al niño como responsabilidad del Estado, no le brinda el entorno protector y afectivo que éste necesita para desarrollarse como una persona estable, feliz y autosuficiente en su adultez.

“Es por eso que con el SEDEGES nos hemos planteado hacer este proyecto para que los niños tengan la oportunidad de vivir en una familia donde se sientan protegidos mientras se resuelven sus problemas familiares, sociales y legales”, refirió Villazón.

El evento fue una oportunidad para compartir experiencias y estrechar lazos que contribuyan a reafirmar el compromiso de todos los involucrados en este proyecto, que busca dar una oportunidad justa a aquellos niños, niñas y adolescentes que lo necesitan.

Por su parte los representantes de los servicios de protección a nivel municipal reiteraron su compromiso para avanzar en la reglamentación y la normativa para restituir el derecho de los niños y niñas de poder disfrutar del amor y cuidados de una familia.  

Luis Ángel Yampara, jefe de la Unidad de Atención a la Familia del municipio alteño, expresó su preocupación ante los altos índices de abandono en esta urbe y agregó que si bien, en los centros de acogida dependientes del Estado se hacen los esfuerzos posibles para brindar buenas condiciones a los niños institucionalizados, es importante trabajar en la implementación de modalidades alternativas de cuidado, que den respuesta a todas las necesidades que tiene una persona en su niñez y adolescencia.