Pétalos de confianza
Inspiradores

Pétalos de confianza

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“La violencia es cuando una persona te grita, no te escucha y te hace sentir muy mal, mi mamá nunca me grita, me habla con cariño, me abraza, me lleva al colegio y me escucha eso me hace sentir muy feliz”, dice Mariela.

Mariela realiza muy concentrada una flor en la pared de su cuarto, en cada pétalo escribe el nombre de una persona en la que confía, el primer pétalo lleva el nombre de su mamá, el segundo y tercero de sus abuelos y así poco a poco va completando la flor que se quedará pegada en su cuarto como un tesoro.

Daniela observa fijamente la flor que su hija creó en la pared de su cuarto e identifica cada nombre de su red de apoyo personal “Mariela sabe cuidarse, ella sabe que su cuerpo es un tesoro, reconoce a quien puede y a quien no puede pedir ayuda, es un trabajo que seguiremos realizando juntas”, indica.

Hace un año su situación no era la misma, se sentían temerosas e inseguras, Daniela había descuidado a su hija porque la violencia psicológica que recibía de su pareja no le permitía pensar en nada más y su desarrollo estaba rezagado.

Daniela buscó apoyo en la Defensoría de la Niñez para salvar su situación familiar, “decidimos acudir a la Defensoría para recibir apoyo psicológico y así arreglar nuestra situación, pero en el transcurso de la primera sesión me di cuenta de que no había solución, la psicóloga me guío para que pueda ser parte del servicio de contención familiar de Aldeas Infantiles SOS y después volví a casa de mis papás”.

Desde su ingreso al servicio de contención familiar Daniela descubrió una nueva forma de crianza, con amor y normas, lo que le permite a Mariela sentirse importante y libre para expresarse.

La familia al ser parte del servicio de contención familiar, también forman parte del proyecto Construyendo entornos seguros para la niñez y adolescencia con énfasis en la prevención de la violencia sexual, que se ejecuta en alianza con la Fundación Save The Children y que está dirigida a prevenir la violencia física como castigo y prevenir la violencia sexual en niñas, niños y adolescentes en más de cien familias en riesgo de pérdida del cuidado familiar.

“La violencia es cuando una persona te grita, no te escucha y te hace sentir muy mal, mi mamá nunca me grita, me habla con cariño, me abraza, me lleva al colegio y me escucha eso me hace sentir muy feliz”, dice Mariela muy segura de haber comprendido que es la violencia.

El proyecto piloto que es ejecutado por los asesores de desarrollo familiar de Aldeas Infantiles SOS en Sucre adaptó la metodología del proyecto transferida por Save The Children para cada familia, de acuerdo a su cultura y lenguaje particular.

“Es un proceso de desarrollo de competencias, concientización y de análisis de los padres y o cuidadores de los efectos de la violencia en la crianza de las niñas y niños, por eso las dinámicas realizadas se adaptan a su situación familiar particular” indica Marcelo, el asesor de desarrollo familiar que acompaña a Mariela y Daniela en su desarrollo como familia.