Los Centros Infantiles de Emergencia instalados en Mokomokal, Ñaurenda y Saladito de Ñaurenda están albergando a 92 niñas y niños cuyas familias fueron afectadas por el aluvión vivido el pasado 21 de febrero de 2022.
El involucramiento de la comunidad es muy importante. Las educadoras y manipuladoras de los centros infantiles de emergencia fueron personas escogidas por sus comunidades y quienes están en capacitación constante para brindar una atención de calidad a las niñas y niños.
Temas como la construcción de rutinas diarias, áreas de desarrollo infantil, dibujo pedagógico son abordados con las educadoras. En los siguientes días comenzará la capacitación en estimulación temprana de acuerdo al método Montessori, adaptando los instrumentos a los materiales que existen en el entorno de las comunidades, considerando el componente cultural en la adaptación de esta metodología.
“Las educadoras demuestran mucho entusiasmo en aprender, preguntan, aportan ideas, con ellas vamos adaptando algunos de los juegos que conocemos al idioma guaraní, para que los niños no olviden el idioma de sus padres y abuelos. Ellas están comprendiendo lo importante que es brindar un cuidado de calidad a los niños pequeños, sobre todo después del desastre natural que vivieron en sus comunidades” indica Antonia Montellanos, Asesora de Desarrollo Familiar en la zona de emergencia.
En tanto, las manipuladoras de alimentos, quienes se encargan de la preparación de la comida, son capacitadas en estándares de alimentación, preparación de desayunos, meriendas, almuerzos y té, construyendo menús en base a las necesidades nutricionales de los niños de primera infancia y tomando en cuenta los hábitos y costumbres de su cultura.
El acompañamiento y asesoramiento del equipo de asesores de desarrollo familiar de Aldeas Infantiles SOS es permanente en los mismos centros infantiles de emergencia. Existe un centro del Programa de Emergencia en la comunidad de Timboy y desde allí, el equipo se traslada hasta Mokomokal, Saladito de Ñaurenda, Ñaurenda y Tomatirenda, para apoyar en el trabajo que se realiza con las niñas y niños que participan de los centros infantiles de emergencia.