Antes de la COVID-19, la situación de Florinda no era nada fácil y cuando se contagió con el virus aumentó su estrés y afectó directamente a la capacidad de brindar un ambiente protector a sus hijos de 6 y 8 años. Ahora la familia es parte de un proyecto de fortalecimiento familiar que implementa Aldeas Infantiles SOS y el Gobierno Autónomo Municipal de Sucre para apoyar a 250 niñas y niños de 83 familias que fueron afectadas por la pandemia y así evitar que las niñas y niños pierdan el cuidado parental.

El proyecto “Fortalecimiento de familias en alto riesgo social de pérdida del cuidado parental agudizado por la pandemia del COVID-19”, fue relanzado en la ciudad de Sucre como un servicio de atención integral a niñas, niños y sus familias que tendrá un tiempo de ejecución de 4 años.

Las familias participantes, en 73% son monoparentales, el 65% no ha tenido acceso a la conclusión del bachillerato, el 45% se encuentra en la economía informal y otro 45% no puede tener ninguna actividad económica; contextos donde las niñas y niños corren alto riesgo de perder el cuidado de sus familias.

Al respecto, la gerente del programa Sucre de Aldeas Infantiles SOS comenta, “existen muchos factores para que niñas y niños pierdan el cuidado parental y son de orden particular y estructural en las familias y la sociedad, respectivamente. La pandemia del COVID-19 agudiza la magnitud de sus problemas y los verdaderamente afectados son las niñas y niños porque no pueden crecer y desarrollarse plenamente, pues están en entornos con altos niveles de estrés incrementados por la crisis sanitaria”.

A su vez, la Secretaria Municipal de Desarrollo Humano y Social, Teresa Silvana Flores Murillo, destacó el esfuerzo conjunto para fortalecer a las familias en riesgo y así evitar que más niñas y niños del municipio pierdan el cuidado familiar. Así también manifestó su intención de impulsar el modelo de Contención Familiar de Aldeas Infantiles SOS en el Programa Municipal de Asistencia Social a la Familia, una vez culmine el proyecto.